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Publicado el 24 de Agosto 2010, en www.pilaradiario.com

Homenaje a los desaparecidos en la Masacre de Fátima

Hasta la victoria... Una militante se inclina ante la placa que recuerda a las 30 víctimas de la masacre.

Con un emotivo acto se recordó ayer el 34º aniversario de la Masacre de Fátima, ocurrida el 20 de agosto de 1976.

El homenaje se realizó frente al monolito que recuerda a los 30 desaparecidos cuyos cuerpos fueron dinamitados en esa localidad durante la última dictadura militar.

Familiares de las víctimas, militantes de distintos organismos sociales y de Derechos Humanos, docentes y alumnos de la Escuela Media Nº 9 de Fátima, participaron del recordatorio.

Tras la lectura de adhesiones, tomó la palabra de Patricia Olivestre, hija de Roberto Olivestre, un delegado de una fábrica metalúrgica de Lanús que fue secuestrado el 30 de julio del mismo año mientras dormía junto a su mujer y sus tres hijos de entre 1 y 6 años.

De esta manera transcurrió la primera parte del homenaje que prosiguió en la Escuela 9 con la exposición de dos guías del actual Museo de la Escuela Superior de Mecánica de la Armada (ESMA), uno de los principales centros de detención clandestinos de la dictadura militar. Un video realizado por alumnos, lectura de poemas, música en vivo, y una caminata con antorchas por la localidad y el bautismo de la sala de música del establecimiento educativo con el nombre de una de las víctimas de la masacre, Horacio García Gastelú, dieron cierre a la jornada.

Diferencias

Tras algunas diferencias en la organización entre los familiares y el flamante director de Derechos Humanos del Municipio, Marcelo Mendoza, por la mañana el acto oficial se hizo con la colocación de una ofrenda floral.

Uno de los familiares referentes de la organización de los actos en recuerdo de los desaparecidos en la Masacre de Fátima, Hugo Argente, hermano de Jorge Daniel Argente (una de las 30 víctimas), aclaró: “no hubo ninguna pelea, ni una guerra como se dijo, sólo disentimos de la organización con el funcionario que puso el Municipio” y agregó: “nosotros no somos los dueños de la verdad, pero tenemos todo el derecho de no estar de acuerdo con la organización del Municipio” y cerró: “el director de Derechos Humanos no tiene experiencia, ni está informado, no sabía ni siquiera que el día estaba declarado de interés municipal hace 11 años, pero la culpa no es de él”.

Las víctimas

En las últimas semanas, el Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF) identificó los restos de otra de las víctimas de las 30 que tuvo la Masacre de Fátima. Fue con los restos de Cecilia Podolsky de Bronzel, cuyo hijo, José Bronzel, y su nuera, Susana Elena Pedrini, también fueron asesinados en el mismo hecho.

El reconocimiento de Podolsky de Bronzel es el tercero que se produce en el año. Los anteriores habían sido los de María Rosa Lincoln y Enrique Jorge Aggio, un analista de sistemas desaparecido el 31 de julio de 1976.

Los 20 cuerpos identificados son los de: Inés Nocetti, Ramón Lorenzo Vélez, Ángel Osvaldo Leiva, Alberto Evaristo Comas y Conrado Alzogaray, Susana Elena Pedrini de Bronzel, José Daniel Bronzel, Selma Julia Ocampo, Haydeé Rosa Cirullo de Carnaghi, Carmen Carnaghi, Norma Susana, Fontini, Jorge Daniel Argente, Horacio Oscar García Gastelú, Juan Carlos Vera, Carlos Raúl Pargas, Ricardo José Herrera Carrizo, María Rosa Lincoln, Enrique Jorge Aggio, Olivestre Roberto Héctor y Cecilia Podolsky de Bronzel. Pero aún restan 10 desaparecidos que hasta ahora son NN.

La masacre se cometió el 20 de agosto de 1976, cuando 30 jóvenes detenidos clandestinamente en la dirección de Coordinación Federal fueron asesinados y sus cuerpos trasladados en camiones a Fátima, donde fueron dinamitados.

Por el caso fueron condenados a prisión perpetua a Carlos Gallone y Juan Carlos Lapuyole, y resultó absuelto, Miguel Ángel Timarchi.